finalmente vi emilia pérez
comment être français et faire un film sur le Mexique sans les mexicains!
Con el paso del tiempo me he vuelto más y más rebelde ante los tiempos del mundo. Cuando la expectativa o lo típico es, por ejemplo, subir un carrusel de los momentos más importantes de 2024 a finales de diciembre (o como mucho, en los primeros 10 días de enero), o cuando se estrena una película y la tendencia es verla para escribir una reseña lo más pronto posible, para aprovechar que “el tema está caliente,” pues… por lo general yo no me monto en esas olas. (¿Será que quizás debería?)
Podríamos decir que es un acto de resistencia ante los tiempos del capitalismo y la cultura de la inmediatez, ante el concepto de “moda” y de que las fechas de expiración son cada vez más prontas.
Todo esto para decir que finalmente, a mi ritmo, vi Emilia Pérez. And I have thoughts.
contra los prejuicios
Algo que siempre me ha parecido vital es ver una película estando libre de la mayor cantidad de ideas preconcebidas posibles. Por esta misma razón trato de no ver trailers, incluso en este caso.
Con Emilia Pérez, sin embargo, fue súmamente difícil evitar toparse con comentarios, reseñas y opiniones sobre ella, especialmente después de los Golden Globes. Rápidamente me percaté de que esta cinta controversial tenía opiniones vastamente mixtas, y como dicen por ahí, “there’s no such thing as bad publicity” porque el nivel de polémica fue lo que finalmente me condujo a darle play a esta peli previo a otras de mi watchlist.
Me había topado ya con comentarios como “esta es una película sobre México sin Mexicanos”, pero también otros que alababan la actuación de Zoe Saldaña y la dirección de Jacques Audiard. Al sentarme para ver la película, decidí darle el beneficio de la duda y no predisponerme ante absolutamente nada, dejar que la película me hablara. Y no solo me habló, también me cantó, sin mi consentimiento, porque… qué carajos fue eso?
Sin más ni menos, vamo allá, punto por punto:
the No’s
“Emilia Pérez es una película de comedia musical y criminal franco mexicana…”
Así lo describe wikipedia. Pero epérate1; ¿Comedia??? ¿Musical???? Auxilio. Vamo a chancearla; ok, ciertamente es un musical, porque cada vez que por fin siento que comienzo a sumergirme en la historia, viene un(a) MMG2 a ponerse a cantar, sacudiéndome abruptamente del trance narrativo que se supone son el objetivo de cualquier cinta audiovisual. Ojo, nunca he sido anti-musicales, por lo general me los disfruto un montón y creo que esta es la primera peli musical que no me gusta, así que, ya eso dice mucho.
Lo que pienso es que un buen número musical nos cuenta algo nuevo, o como mínimo, nos permite profundizar en la perspectiva de un personaje. En Emilia Pérez, sin embargo, cada vez que alguien estalla a cantar, se siente innecesariamente redundante—tanto, que mi respuesta fisiológica inconsciente fue rolling my eyes a medida que continuaban manifestándose esos momentos de “música.” Tan solo recordar esas escenas como el “Habla, esta gente habla, pero ahora lo van a pagar, a pagar, a pagar…” de Zoe Saldaña, o aquel horror que canta Selena Gómez en la cama, hace que—de verdad, sin exagerar—me estremezca del cringe.
Ahora… ¿una comedia? Si esa fue su intención, falló miserablemente. (No, la ridiculez detrás del número musical “from penis to vagina!” no es comedia, Jacques.)
“Write about what you know”
Este es un debate interminable. Con frecuencia se dice “escribe sobre lo que sabes”, y esto tiene opiniones polarizadas; por un lado, están quienes defienden la necesidad de mantener la integridad de las historias y grupos representados en las mismas, insistiendo en que solo tenemos derecho de abordar aquellos temas con los que estamos realmente, personalmente conectados. Por otro lado, están quienes se oponen y exclaman que esto es tremendamente limitante, y que así como hay muchas autoras que crean protagonistas masculinos, y viceversa, deberíamos tener total libertad como contadores de historias.
En lo personal me parece que hay una delgada línea al decidir qué abordar y por qué, y que es primordial tomar todos los factores en cuenta. Es tan complejo que no siento que haya una sola regla que aplique para todo, sino que debe juzgarse caso por caso. En esta ocasión, el ojo en la tormenta del huracán es Emilia Pérez; y aunque me parece que se vale tomarse ciertas libertades con el casting (se cubren con Zoe Saldaña cuando la hacen decir que nació en República Dominicana y se crió en México, por ejemplo), hay algo profundamente preocupante en que un hombre cis francés en la tercera edad, sea el director de una película que acontece en México, no solo sin haber tenido ni un solo miembro principal del elenco que no fuese nativo del país, sino que tampoco un co-guionista, asesor de guión, o colaborador principal de cualquier índole que fuese mexicano.
Hay que reconocer que como artistas y creadores tenemos una responsabilidad en rendir un mínimo nivel de respeto a los temas que abordamos y en especial a las comunidades que forman parte de nuestra obra y discurso. Jacques Audiard jugó con fuego porque, encima del furor por la antirepresentación latina, se tiró también en contra a gran parte de la comunidad trans. No me siento cómoda con emitir un juicio sobre qué tan correcto fue su manejo de este tema, pues no formo parte de este grupo, pero el consenso—según pude apreciar—es que lxs espectadores trans de la película se quedaron con una profunda sensación de decepción e impotencia.
“Hasta me duele la pinche vulva nada más de acordarme de ti”
Tú ve’, aquí puedo confesar que Emilia Pérez se acercó, aunque sea en breves instancias, a coquetear con el género de la comedia—gracias al Spanish de Selena Gómez. Por lo menos, ante todo lo insalvable, nos quedamos con esa joya de momento meme.
Sí, la foto de arriba es una reseña real de letterboxd. Si no fuese por el “deserved (merecido)”al final, diría que es una genialidad del sarcasmo, pero no parece, así que… what the fuck? Sit down, gringo.
What’s the goddamn point?
Fuera de coro. De lo que más me molestó de la película es que no tiene una posición clara. Al principio parece que Zoe Saldaña es la protagonista y seguiremos su historia, luego nos damos cuenta de que no, aparentemente la prota es Manitas y su transición hacia Emilia, para conocer sobre los retos que enfrenta una mujer trans, en especial una mujer trans que solía ser un capo (not gonna lie, la trama ‘ta interesante ahí), pero entonces después resulta que la película trata sobre cómo Emilia quiere redimirse al recuperar a sus hijos cuatro (?) años después, el tiempo que le tomó para darse cuenta que “no podía vivir sin ellos”, y de paso ser una “lucecita” para absolver sus pasados pecados al ayudar a las familias víctimas del crimen organizado, pero luego trata de…
(Exacto.)
El último acto de la película es especialmente confuso. ¿Cómo llegamos hasta aquí, y para qué? Jacques, Jacquecito, ¿Qué quisiste decir con esta pinche película?
the Yes’
(Sí, los hay…algunos.)
Coreográficamente bello
Musicalmente pudo haber sido cringe, flojo e innecesario, pero desde el primer número musical que abre la película, con Zoe en las calles de México, pude apreciar la calidad coreográfica, a nivel de baile, blocking y dirección. Esto sí que me encantó.
Zoe Saldaña
Sí, sí, soy dominicana al igual que Zoe y tal vez ‘toy un poco predispuesta. Pero me pareció un muy buen performance—no el mejor del año, sinceramente, pero muy sólido, y con un mejor guion (y mejores condiciones como película en general) se que su desempeño pudo haber sido mil veces mejor todavía.
Como mencioné anteriormente, los escritores se cubrieron aquí cuando Zoe menciona que nació en RD, pero coño Zoe, tú pudiste haber practicado un poquito más el acentico del no mames.
Karla Sofía Gascón
No la conocía, la amé, y hasta pensé que era mexicana, definitivamente no pensé que era española. creo que fue la quien más se esforzó en interpretar su personaje. Al igual que con Zoe, si el guion le hubiese permitido más brillo y profundidad, estoy segura de que hubiese superado las expectativas.
Suficiente de mis opiniones; ¿tú qué piensas? Lo productivo de las polémicas es que es terreno fértil para tener conversaciones estimulantes, y sobre todo, para aprender.
Y si te gustó leer, dime si…
As in: espérate (Segunda persona del singular (tú) del imperativo afirmativo de esperarse)
Del español dominicano: mama güeb0
Estoy muy de acuerdo con todos tus puntos, la verdad es exasperante como la película sigue ganando premios y buenas reseñas. Esperemos que todo el pushback que está teniendo se traduzca como menos premios en los Oscars